La crisis en el sector agrícola continúa agravándose, esta vez con la exigencia de medidas urgentes por parte de la industria cerealista al Gobierno. Los bajos precios del cereal han llevado a Agricultura a alzar la voz y solicitar soluciones inmediatas para hacer frente a esta difícil situación.
Además, el ministro González Corral ha expresado su preocupación por el incremento del contingente de remolacha procedente de Ucrania, lo que complica aún más la situación para los productores nacionales. Esta competencia desleal amenaza con poner en peligro la viabilidad de muchas explotaciones agrícolas.
Ante este escenario, se hace evidente la necesidad de una acción decidida por parte del Gobierno para proteger a los agricultores locales y garantizar la sostenibilidad del sector. La falta de rentabilidad pone en riesgo la seguridad alimentaria del país, por lo que es imperativo tomar medidas que permitan frenar esta crisis y asegurar un futuro estable para la agricultura española.