El alcalde de León, José Antonio Diez, declaró ayer que mantiene conversaciones con la Junta para abordar mejoras en los centros educativos de León, que son, según apuntó, los más antiguos de la Comunidad. Unas conversaciones que llegan tras años de conflicto para determinar de qué administración son las competencias, mientras los colegios sufren las goteras o las constantes averías en las calderas.
«Yo creo que no tardando mucho habrá alguna noticia entre el Ayuntamiento y la Consejería de Educación que demostrará que, efectivamente, cuando se habla, cuando hay diálogo y cuando hay voluntad por las partes, las cosas pueden mejorar», puntualizó.
No obstante, precisó que este acercamiento de posturas «no quiere decir que de la noche a la mañana todo vaya a mejorar», pero sí destacó la «voluntad política» por parte de la Administración autonómica y el Consistorio de León para coordinarse y poder realizar una tarea satisfactoria que mejore los colegios.
En este contexto, recordó que el Ayuntamiento aporta un millón de euros al año en materia de mantenimiento de centros educativos, una aportación que se sumará a las mejoras que se abordarán de la mano de la Junta. «Con la Junta hay unas conversaciones muy avanzadas que espero que en los próximos días haya algún anuncio al respecto», dijo, para agregar que este compromiso permitirá, de manera paulatina, que los centros escolares públicos de León tengan un nivel «acorde» a la exigencia que requieren los niños y los docentes que desarrollan su actividad en ellos.
José Antonio Diez se pronunció de este modo en el Coto Escolar, donde se presentó la programación diseñada para el actual curso escolar a los directores y responsables de los centros educativos de la ciudad.
La mejora de las infraestructuras educativas en León es una demanda constante de la comunidad educativa y de las familias, que ven cómo las condiciones de los centros afectan al desarrollo académico de los estudiantes. Con este acuerdo, se espera que se puedan solventar problemas históricos y mejorar la calidad educativa en la provincia.
A nivel autonómico, este tipo de acuerdos podrían servir de ejemplo para otras provincias de Castilla y León que enfrentan situaciones similares. La colaboración entre administraciones es vista como un paso positivo hacia la resolución de problemas estructurales en la educación pública.
En el futuro, se espera que las medidas acordadas se implementen de manera efectiva y que el diálogo entre las partes continúe para asegurar el mantenimiento y la mejora continua de los centros educativos en León. La comunidad educativa aguarda con expectativa los próximos anuncios y la ejecución de los compromisos adquiridos.
