Juan Carlos Suárez-Quiñones, consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, ha colaborado en los actos de celebración de la rehabilitación del pueblo de Peón de Arriba, que se ha reconvertido en un albergue turístico ecológico, y donde se han creado rutas en su entorno natural para producir turismo de naturaleza que pueda favorecer al desarrollo económico y social de la zona. De esta forma, el Ayuntamiento de Carracedelo, al que pertenece este pequeño núcleo de población que estaba abandonado desde 1962, en colaboración con los propietarios de viviendas y de varias fincas colindantes, ha conseguido el propósito de crear una eco aldea sostenible. Culmina así un proceso de doce años, con una inversión realizada de más de 836.000 euros, promovido por el Ayuntamiento, con la colaboración de la Diputación y la Junta de Castilla y León.
El progreso entendido en el siglo XX consiguió el paulatino abandono de las formas de vida tradicionales en las zonas rurales y, por consecuencia, de algunos de los lugares donde estas se fomentaban, particularmente aquellos que quedaron alejados de las nuevas rutas de comunicación, de los nuevos centros productivos y de los espacios favorecidos por la implantación de servicios a la ciudadanía.
Peón de Arriba, desfavorecido desde todos los puntos de vista, gradualmente fue perdiendo su población, se desplazó en buena parte hacia núcleos próximos con muchos más recursos y de mayor tamaño, hasta su completo abandono desde 1962, durante el que se ha producido una fuerte degradación de sus construcciones tradicionales, acelerada en los últimos años.
La no intervención en estas viviendas y su entorno habría producido una pérdida más del patrimonio de Castilla y León, tanto en el orden histórico como en el etnográfico, beneficiando la desconexión de las nuevas generaciones con un pasado, también en el ámbito paisajístico y ambiental.
Impulso turístico con el nuevo albergue y un entorno arquitectónico y natural singular
Con esta participación turístico-medioambiental que se ha presentado hoy en Peón de Arriba, propulsado por el Ayuntamiento de Carracedelo, se recupera en un entorno natural que destaca por su gran potencial para el senderismo, la pesca o actividades acuáticas, como el piragüismo, el senderismo y bicicleta; se protegen elementos singulares de la arquitectura tradicional, que es seña de identidad del pueblo, del municipio y de la comarca, y se generan oportunidades de empleo en la zona, con lo que se mejora el desarrollo económico y social, contribuyendo a sentar población en el medio rural.
Después de realizar una ruta medioambiental desde el campo de fútbol de Villadepalos sufriendo hasta el pueblo de Peón Arriba, Juan Carlos Suárez-Quiñones, consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, junto a Raúl Valcarce, alcalde de Carracedelo; Eduardo Morán, presidente de la Diputación de León; Ester Muñoz, delegada territorial de la Junta; entre otros, como el empresario hostelero José Luis Prada, o Edelmiro Ramos, de León Aventura-, señaló que este complejo de Peón de Arriba es un lugar que va más allá de un mero turismo de descanso, pues permite disfrutar de un conjunto de actividades y de paisajes sin igual que hace del mismo una verdadera experiencia.
El albergue concebido en Peón de Arriba dispondrá de 30 plazas repartidas en 7 habitaciones (3 de dos plazas, 2 de cuatro y otras 2 de ocho). En el primer edificio se encontrarán las zonas comunes – salón, cocina, comedor y baño -. En la primera planta, hay un apartamento de dos plazas, con dos habitaciones, salón, comedor, cocina y baño completo.
Luego, en el segundo edificio habrá una habitación completa con baño y en la primera otra similar. En el edificio 3A existirá una habitación doble con una litera, en ese mismo espacio está la lavandería. Por otro lado, en la primera planta hay dos dobles, una además con litera (ambas con baño). En el edificio 3B están las 2 habitaciones de 8 personas, con 4 literas cada una (y, al igual que todas las demás, baño completo).
La inversión de este proceso de rehabilitación ambiental y arquitectónica ha sido de 836.542 euros, cofinanciados por el Ayuntamiento de Carracedelo, la Diputación Provincial y la Junta de Castilla y León que, entre otras aportaciones, ha participado en la instalación de 54 paneles solares fotovoltaicos para generar energía sostenible suficiente, también de otras instalaciones como aerotermia y otras necesarias para el funcionamiento y seguridad del complejo.
Suárez-Quiñones, consejero, ha felicitado al alcalde de Carracedelo, Raúl Valcarcel, y a la corporación municipal por preocuparse, además de la gestión ordinaria del municipio, de tener ideas innovadoras y que crean actividad económica, lo que, señaló, “precisa, además de la idea, tener capacidad para llevarla a cabo y una gestión económica municipal que permite tener recursos para afrontarla junto con el resto de Administraciones”.
Además, destacó, la actuación es un buen exponente de lucha contra la despoblación y contra ese negativo término de la España vaciada, poniendo de manifiesto que el medio rural y Castilla y León es una tierra de oportunidades.
Un poco de historia
El pueblo de Peón de Arriba cuyo nombre deriva etimológicamente de ‘peñedón’ (peñasco)- en la actualidad un despoblado desde la salida de sus últimos habitantes en 1962, se compone como el lugar situado a más altitud del municipio de Carracedelo, contrastando con la ubicación de los núcleos poblaciones que lo constituyen, localizados en el fondo de la denominada hoya del Bierzo.
Por su parte, también es el único lugar del municipio de Carracedelo ubicado en la margen izquierda del río Sil, al que cabría añadir otro despoblado -Nancín-, asociado a Villaverde de la Abadía, pero del que en la actualidad no quedan vestigios visibles.
Las fuentes documentales antiguas en relación con este lugar son muy limitadas. Su pequeña extensión y su vínculo, como barrio, con el pueblo de Villadepalos, lo han silenciado. Además, hay que tener presente la existencia de otro barrio con igual raíz (Peón de Abajo), pero vinculado al pueblo de Paradela y, como resultado, al Ayuntamiento de Corullón hasta 1986, y desde entonces al de Villadecanes-Toral de los Vados (actualmente solo Toral de los Vados).