En un giro inesperado, la Unión Europea ha concluido que el reciente apagón que afectó a gran parte de España no fue causado por un exceso de energía renovable en el sistema, como se había especulado inicialmente. Según los expertos de la UE, el verdadero detonante detrás del colapso eléctrico fue la incapacidad de controlar adecuadamente el voltaje en la red española.
Este incidente, catalogado como «el más grave en 20 años», ha generado preocupación entre los especialistas y autoridades energéticas europeas, quienes han denunciado la falta de datos y transparencia por parte de las autoridades españolas en torno a lo sucedido. La necesidad de una mayor coordinación y supervisión en el sistema eléctrico se ha vuelto imperativa para evitar futuros episodios de esta magnitud.
Ante esta revelación, se abre un nuevo capítulo en la investigación del apagón, desafiando las primeras teorías sobre las causas del incidente. La importancia de mantener un sistema eléctrico estable y seguro se vuelve aún más evidente en medio de la transición hacia fuentes de energía más sostenibles en Europa.

 
                 
                