La Comunidad de Castilla y León cerró el año 2024 con una deuda de 14.239 millones de euros, lo que representa el 18,9% del Producto Interior Bruto (PIB), según los datos del Banco de España. Este nivel de endeudamiento es el más bajo de los últimos diez años y se sitúa 2,2 puntos por debajo de la media autonómica. Esta reducción ha sido respaldada por la agencia Moody’s, que ha mejorado la perspectiva financiera de la región de estable a positiva.
El 31 de marzo de 2025, la Consejería de Economía y Hacienda de Castilla y León informó que la aportación de la comunidad al endeudamiento global de las autonomías españolas se redujo al 4,24% del total, con un endeudamiento de 335.977 millones de euros.
A finales de 2024, la deuda de Castilla y León disminuyó en 5 puntos porcentuales respecto a 2014, cuando alcanzaba el 21,1% del PIB. Esta mejora ha sido posible gracias a una gestión presupuestaria eficiente y al control del gasto en servicios públicos esenciales.
El análisis de la estructura de la deuda revela que el mayor porcentaje corresponde a préstamos de deuda pública, que representaron el 20,7%, y a créditos comerciales con entidades financieras, que sumaron 10,8 millones de euros. Además, el Fondo de Facilidad Financiera aportó 1.774,2 millones de euros, lo que representa el 12,5% del endeudamiento.
Entre los prestamistas relevantes se encuentran el Banco Europeo de Inversiones y el Banco de Desarrollo del Consejo de Europa, con 1.590,9 millones de euros, el 11,2% de la deuda total.
El 96,8% de la deuda de Castilla y León corresponde a la Administración General, mientras que el resto pertenece a universidades y organismos autónomos.
Respecto a los plazos de vencimiento, el 99,4% de la deuda está a largo plazo, con un interés fijo del 0,6% y variable del 2,8%.
La mejora en la gestión financiera de Castilla y León ha sido reconocida por Moody’s, que ha elevado su calificación a Baal con perspectiva positiva. Esto refleja la capacidad de la comunidad para gestionar su deuda de manera eficiente y su accesibilidad al mercado de deuda.
Finalmente, el Banco de España contabiliza 4.344 millones de euros adicionales de deuda no incluida en el perímetro SEC 2010, lo que elevaría la ratio de endeudamiento al 21,4% del PIB en 2024. Sin embargo, Castilla y León mantiene una sólida posición financiera, destacando su capacidad para afrontar sus compromisos económicos.
