La inspección técnica realizada en la mina de Cerredo ha revelado la presencia de grisú, un gas altamente inflamable y peligroso, según confirmó la consejera asturiana. Este hallazgo surge en medio de la investigación sobre la explosión que cobró la vida de cinco mineros leoneses a finales de marzo. A pesar de la confirmación, la consejera ha llamado a la prudencia y a esperar los resultados completos del análisis de todos los datos recopilados. La presencia de grisú en la mina plantea interrogantes sobre las medidas de seguridad y las condiciones de trabajo en el sector minero, generando preocupación en la comunidad y en los familiares de los trabajadores afectados por esta tragedia.
Artículos Relacionados
Mercadona destina más de 2.600 millones a proveedores de Castilla y León en un año.
El gigante de la distribución Mercadona ha fortalecido su relación...
Corredor rechaza compensaciones por apagón al considerar que no hubo fallos
El corredor responsable del sistema eléctrico ha descartado la posibilidad...
La Audiencia desestima la petición de suspensión de la consulta pública en la opa
La Audiencia ha tomado una decisión contundente al rechazar la...