El Canal Bajo del Bierzo se encuentra en la recta final de un proceso clave: la identificación de los dueños de 210 hectáreas de terreno. Este paso es fundamental en el marco de la modernización del regadío en la zona, que busca mejorar las condiciones de cultivo y garantizar un uso más eficiente del agua.
Concretamente, se estima que un 11% de propietarios se verán afectados por esta iniciativa, que tiene un impacto directo en la localidad de Ponferrada. La urgencia por completar este proceso se hace evidente, ya que la actualización y optimización de las infraestructuras de riego son fundamentales para impulsar la productividad agrícola en la región.
A medida que se avanza en la identificación de los propietarios, se espera que se puedan establecer acuerdos y soluciones que permitan llevar a cabo las obras necesarias para la modernización del regadío de manera efectiva y beneficiosa para todos los implicados. La colaboración entre las autoridades locales y los dueños de las tierras será fundamental para garantizar el éxito de este proyecto que promete impulsar el desarrollo agrícola en el Canal Bajo del Bierzo.