En un escenario de confrontación política, la tensión entre el Partido Popular (PP) y la Unión del Pueblo Leonés (UPL) en el Ayuntamiento de San Andrés ha alcanzado su punto álgido con la expulsión de los cinco ediles populares del pleno. Todo comenzó cuando la alcaldesa se vio sorprendida por una pregunta incisiva sobre la responsabilidad económica en el proceso del interventor municipal, el cual hasta el momento ha resultado infructuoso.
El cruce de palabras entre la alcaldesa y la portavoz del PP llevó a tres llamadas al orden por parte de la presidencia del pleno, culminando en la expulsión de los concejales del Partido Popular. Este episodio de confrontación verbal refleja la crispación política que se vive en San Andrés, evidenciando las tensiones y desavenencias entre las diferentes fuerzas representadas en el consistorio.
La ciudadanía observa con preocupación cómo los debates políticos se convierten en enfrentamientos estériles, dejando de lado el interés común y el diálogo constructivo. La expulsión de los ediles populares del pleno es un síntoma de la polarización política que afecta a la gestión municipal y pone en evidencia la difícil convivencia entre las distintas fuerzas políticas en el ámbito local.

 
                 
                