En la última jornada del juicio que enfrenta al presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, por el polémico incidente del beso a la jugadora Jenni Hermoso, se vivieron momentos de tensión y expectativa en la sala del tribunal. La defensa de Rubiales argumentó que el gesto fue un acto de cariño y apoyo a la futbolista, mientras que la acusación insistió en que se trató de una falta de respeto y un abuso de poder por parte del dirigente deportivo.
Durante la audiencia, Jenni Hermoso declaró que se sintió incómoda y avergonzada por el beso de Rubiales, que tuvo lugar en un evento oficial. Por su parte, Rubiales se mantuvo firme en su posición de que el gesto fue malinterpretado y que su intención era simplemente mostrar su apoyo a la jugadora.
El juicio ha generado gran interés mediático y ha dividido opiniones en el mundo del fútbol, con numerosas personalidades del deporte y la sociedad tomando posturas encontradas. Se espera que en los próximos días se dicte sentencia y se ponga fin a este caso que ha generado controversia y debate en el ámbito deportivo español.
