El servicio de urgencias de los hospitales se encuentra desbordado debido a la alta afluencia de pacientes que, en su mayoría, han decidido acudir directamente a este servicio sin pasar por atención primaria. En enero, mes en el que tradicionalmente se registra un pico de 500 personas atendidas diariamente por virus respiratorios y estomacales, el 67% de los pacientes llegan por cuenta propia a urgencias, evitando la consulta previa con su médico de cabecera.
Esta situación pone de manifiesto la saturación de los servicios de salud y la falta de coordinación entre los diferentes niveles asistenciales. La decisión de acudir directamente a urgencias puede deberse a la dificultad de conseguir una cita previa en atención primaria o a la percepción de una mayor rapidez en la atención en el servicio de emergencias.
Ante esta realidad, es importante reforzar la importancia de acudir en primera instancia a atención primaria para la resolución de problemas de salud que no revistan gravedad, dejando las urgencias hospitalarias para situaciones de emergencia. La colaboración y coordinación entre los distintos niveles asistenciales es fundamental para garantizar una atención eficiente y de calidad a todos los pacientes.
