El magnate español Juan Roig, propietario de la cadena de supermercados Mercadona, ha lanzado un mensaje contundente a sus colegas empresarios: no hay que avergonzarse de ganar dinero y pagar impuestos. Durante una conferencia, Roig instó a sus homólogos a sentirse orgullosos de sus logros financieros y a salir del armario en cuanto a sus beneficios. «Ganar dinero es bueno», afirmó Roig, quien argumentó que sin beneficios no se puede garantizar la satisfacción de los empleados y proveedores.
El empresario también abogó por una gestión más eficiente de las cargas fiscales, defendiendo que una mejor administración de los impuestos podría beneficiar a la sociedad en su conjunto. Estas declaraciones de Roig han generado un debate en el sector empresarial y político, donde algunos han respaldado su postura mientras que otros han expresado dudas sobre la equidad en la distribución de la riqueza.
En un contexto marcado por la crisis económica y la presión fiscal, las palabras de Juan Roig resuenan con fuerza entre la comunidad empresarial. Su llamado a no esconder el éxito económico y a contribuir al bienestar social a través de los impuestos plantea interrogantes sobre el papel de las grandes fortunas en la sociedad actual. Sin duda, el mensaje del dueño de Mercadona ha abierto un interesante debate sobre la responsabilidad de los empresarios en la creación de riqueza y su contribución al sistema impositivo.
