Se procedió al desmontaje de todo el sistema en un taller especializado para que continuara el viaje, haciéndose cargo de los gastos del taller el propio usuario, así como la correspondiente sanción económica y la pérdida de puntos de su permiso de conducción.
08 de febrero de 2023.- Una patrulla de la Guardia Civil perteneciente al Grupo Operativo del Subsector de Tráfico de León detectó un vehículo sospechoso de llevar un aparato detector o inhibidor de radares o cinemómetros.
Los agentes circulaban por la autovía A-231 (León-Burgos) sentido decreciente realizando vigilancia de la velocidad en modo dinámico cuando a la altura del Km 47 observaron un vehículo que se les aproximaba a gran velocidad, reduciendo la misma de manera brusca al acercarse al propio vehículo radar y adelantando al mismo de una manera poco habitual. Al parar el vehículo e identificar al conductor y realizarle una primera inspección al vehículo, se observó un testigo LED de color rojo situado a la altura de la vista del conductor que parpadeaba al detectar la presencia del radar. Se le informó al conductor de que para proseguir su viaje se debía desmontar dicho aparato por un taller autorizado, verificando si se trataba de un detector o de un inhibidor.
Acompañado a un taller especializado para el desmontaje del aparato e informado de que según la legislación vigente debía hacerse responsable de los gastos del taller, se desmontó todo el sistema, que se hallaba oculto tras el parachoques delantero y bajo el salpicadero, procediendo a su inutilización.
El conductor manifestó que el montaje e instalación de este sistema se había llevado a cabo en un taller de la provincia de Barcelona.
El hecho de llevar un detector instalado en el coche está considerado como una infracción grave y supone una multa de 200 euros y la retirada de 3 puntos del carnet de conducir.
Más grave lo es llevar instalado un inhibidor de radar, que implica una sanción económica de hasta 6.000 euros y 6 puntos de retirada del permiso de conducción para el conductor del vehículo, así como una sanción de 30.000 euros al taller encargado de su montaje.
Servicio de alertas mediante la “app Alertcops”
La Guardia Civil recuerda la puesta en marcha años atrás de la APP ALERTCOPS. Esta aplicación móvil es un servicio de alertas que permite comunicarse de manera precisa, gratuita y rápida con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
A través de ella se puede alertar sobre una situación delictiva de la que es víctima o testigo o de una desaparición como es este caso; también permite recibir en el teléfono móvil mensajes de aviso, cuando el mismo se encuentre en una zona afectada por incidencias. La Guardia Civil recomienda su descarga para ponerse en contacto en caso de emergencia con los Centros Operativos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.