La tragedia ha golpeado con fuerza a la comunidad estudiantil en Nápoles, donde se ha vivido una jornada de silencio y dolor tras la trágica muerte de una joven estudiante española. La Erasmus leonesa, de tan solo 20 años, perdió la vida en un fatal accidente cuando fue atropellada por un todoterreno conducido por un joven de 18 años.
Según declaraciones de un amigo cercano, la víctima había llegado a la ciudad italiana con ilusiones y sueños, siendo ayudada por él mismo a encontrar un lugar donde vivir. Su entusiasmo y alegría contagiaban a todos los que la conocían, convirtiéndola en una persona querida y apreciada en su círculo social.
El trágico suceso ha conmocionado a la comunidad universitaria, que se ha unido en muestras de solidaridad y apoyo a la familia y amigos de la joven fallecida. Las autoridades locales han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del accidente y determinar las responsabilidades correspondientes.
En medio del luto y la consternación, queda el recuerdo de una joven llena de vida y energía, cuyo futuro fue truncado de manera abrupta. Su partida deja un vacío en el corazón de quienes la conocieron, recordando siempre su sonrisa y su espíritu alegre.