En una decisión que ha generado controversia, se ha revelado que se está tramitando un contrato de ‘renting’ para dos vehículos destinados a labores de investigación. Según fuentes cercanas, estos automóviles serían utilizados en situaciones que requieran la máxima discreción por parte de los investigadores.
Diversas voces han expresado su preocupación ante esta medida, cuestionando la necesidad de destinar recursos a este tipo de servicios especializados. Algunos expertos en transparencia han señalado que la opacidad en torno al uso de estos automóviles podría plantear interrogantes sobre el manejo de fondos públicos y la rendición de cuentas.
Por su parte, representantes de la institución responsable han defendido la iniciativa, argumentando que la adquisición de estos vehículos en modalidad de ‘renting’ responde a la necesidad de garantizar la seguridad y eficacia de las operaciones de investigación.
La polémica continúa creciendo en torno a este tema, dejando abierta la discusión sobre la pertinencia y transparencia de este tipo de decisiones en el ámbito de la investigación.
