El consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha salido al paso de las críticas sobre el retraso en las compensaciones por ataques del lobo, argumentando que se debe a un «pequeño decalaje» presupuestario. Ante las quejas de los afectados, el consejero ha asegurado que se resolverá la situación «cuanto antes» y ha defendido que los pagos se realizan de forma puntual.
Esta declaración llega en un momento en el que los ganaderos y agricultores afectados por los ataques del lobo han mostrado su malestar por los retrasos en las compensaciones, que les generan dificultades económicas. Suárez-Quiñones ha destacado que se está trabajando para agilizar los procesos administrativos y ha pedido comprensión a los afectados.
La polémica en torno a las compensaciones por ataques del lobo ha generado un debate en la comunidad, con distintos sectores exigiendo una solución rápida y efectiva para garantizar la protección de la ganadería y la agricultura. La presión sobre la Consejería de Medio Ambiente ha aumentado en las últimas semanas, y Suárez-Quiñones ha prometido que se tomarán las medidas necesarias para resolver la situación en beneficio de los afectados.
