León, 2 de agosto de 2023; El paro volvió a descender en León durante el mes de julio en todos los sectores económicos, aunque lo hizo sólo en 72 personas, una tímida caída del 0,33% respecto al mes anterior, que permite seguir bajando la cifra de demandantes de empleo en la provincia a 21.449. Respecto a julio de 2022, el descenso es más pronunciado llegando al 7,57%, lo que significa que 1.757 personas borraron sus nombres de las listas del desempleo en el último año.
León ha sido una de las cinco provincias de la Comunidad que lograron reducir el desempleo en julio, ya que en el resto de provincias aumentó arrojando un 0,08% de subida media en Castilla y León, cuando en el conjunto de España descendió un 0,41% respecto al mes anterior. Sin embargo, en la comparativa interanual Castilla y León registró una caída del paro del 9,09%, superior a la nacional del 7,14%, mientras que León lo hizo en un 7,57%.
En referencia a las afiliaciones, León sumó 1.023 nuevos cotizantes, un 0,72% más que el mes anterior, hasta alcanzar los 167.736 afiliados a la Seguridad Social, un 1,57% más que hace un año, siendo la segunda provincia con mayor número de cotizantes. La afiliación media en Castilla y León aumentó un 0,89% y en España un 0,11% en la comparativa intermensual.
Observamos que decae el ritmo de creación de empleo, perdiendo fuerza a medida que pasan los meses, lo que no ofrece señales claras para pensar que en la segunda parte del año podremos mantener el mismo dinamismo en el mercado de trabajo. La posibilidad de que se contraiga el consumo de los hogares, unido a la persistente inflación, las subidas de los tipos de interés y la incertidumbre política no son buenos compañeros de viaje para que la economía y la actividad empresarial sigan manteniendo el buen pulso que han demostrado a lo largo de los pasados meses.
Si a esto le añadimos la presión fiscal excesiva, la burocracia innecesaria, la ausencia de perfiles profesionales adaptados, los problemas estructurales que arrastra la provincia de León, -especialmente los demográficos que se manifiestan claramente en la reducción de población activa-, las dificultades aumentan para que las empresas puedan seguir acometiendo nuevos proyectos que generen oportunidades de trabajo.