El barrio de los Juncales se vistió de fiesta y color este fin de semana para celebrar su propio Halloween. Los vecinos se unieron para decorar las calles con calabazas, telarañas y luces brillantes, creando un ambiente mágico y festivo para chicos y grandes.
Niños disfrazados de brujas, vampiros y monstruos correteaban de casa en casa en busca de golosinas, mientras los adultos compartían anécdotas y risas en las esquinas decoradas con calaveras y murciélagos.
La iniciativa, impulsada por la comunidad local, buscaba fomentar la convivencia y la diversión en un ambiente seguro y familiar. Los residentes de los Juncales demostraron una vez más que la creatividad y la unión pueden transformar cualquier celebración en una experiencia inolvidable.
Sin duda, este Halloween alternativo en los Juncales quedará grabado en la memoria de todos los que participaron, como un ejemplo de cómo la magia de la comunidad puede convertir una noche común en una celebración extraordinaria. ¡Que viva la creatividad y la alegría en cada rincón de nuestra ciudad!

 
                 
                